Jaime Bassa, vicepresidente de la Convención Constitucional.
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En su séptima semana de instalada la Convención Constitucional -de un total de 52-, la instancia logró acordar aunar los plazos de las tres primeras comisiones transitorias -Reglamento, Presupuesto y Ética- para que calcen con las otras cinco iniciadas dos semanas después.
La fecha de término quedó fijada para el 28 de agosto, para que luego la comisión de Reglamento recoja las propuestas de norma y articulado emanadas de cada una y entregue una formulación integral al pleno. Luego de eso se abrirá, eventualmente, una etapa de votación en general, y una revisión en particular, todo eso, antes del 10 de septiembre.
En definitiva, un periodo de instalación que podrá tardar entre 10 y 11 semanas, lo que constituye una carrera "contra el tiempo" para el vicepresidente de la Convención, Jaime Bassa, aunque aún le resulta prematuro hablar de hacer uso de la prórroga de tres meses establecida entre sus plazos para redactar la Carga Magna. El contenido de la misma, se podrá comenzar a redactar, cree, "la primera semana de octubre", según dijo a El Mercurio.
Con todo, el balance es positivo: "Yo creo que vamos bien. Una de las ventajas y desventajas al mismo tiempo del cargo que tengo yo y Elisa Loncón, es que no estamos metidos en las comisiones pero estamos su desarrollo simultáneamente. Creo que se ha logrado cierta inercia institucional, donde la institución funciona y lleva sus procedimientos adelante, con independencia de la voluntad de sus autoridades", dijo el vicepresidente esta mañana a T13 Radio.
Controversia por Arancibia en la comisión de DD.HH
Una de las controversias que se generó en la últimas semanas fue la aprobación de un voto político en la Comisión de DD.HH., para dejar al constituyente Jorge Arancibia fuera de la fuera de las audiencias públicas, debido a que ejerció como edecán de Augusto Pinochet durante la dictadura.
Ayer, y luego de jornadas de férrea defensa de personeros de Chile Vamos por la exclusión, se acordó su permanencia, pero sin participar de las audiencias en las que se reciban a víctimas o familiares de víctimas de violaciones a DD.HH. Para Bassa, esto finalmente fue resuelto "por la vía institucional", porque Arancibia no asistió a la subcomisión que recibe a las víctimas, por lo que "no hubo que hacer una concesión especial por ninguna de las partes".
"Es importante destacar que en la comisión de DD.HH. se puso en evidencia uno de los conflictos más sensibles que le dan forma a nuestra convivencia social y política, y ese es un conflicto que está permanentemente abierto, que no hemos logrado cerrar del todo y eso se visibilizó de una manera correcta. El conflicto se desplegó de forma respetuosa, pero tajante, las posiciones fueron marcadas con claridad y respeto", agregó.
Ante la duda que queda frente a la pertinencia de que un grupo de constituyentes pueda poner bordes a la actuación de sus pares en función de determinados principios, el vicepresidente de la Convención planteó que "contesto categóricamente que no, que no podemos poner límites entre constituyentes".
Carta de constituyentes de derecha
Como "maravilloso y conmovedor" calificó Bassa la carta firmada por 15 convencionales de derecha donde realizan una autocrítica por el trato que se les ha dado a sus pares de pueblos originarios, donde se comprometieron a avanzar en soluciones.
"Creemos que ese es el tipo de diálogo que la Constituyente debe proponer al país; de construcción desde nuestras diferencias, respetándolas. Parte importante de ese respeto pasa por reconocer las deudas históricas que estamos arrastrando, y dar pequeños pasos de reconocimiento y humildad, y creo que va en el mismo tono de la resolución del conflicto, que deja en evidencia la diferencia, pero que puede ser resuelto trabajando en conjunto", zanjó Bassa.
El texto fue firmado por Raúl Celis, Ruggero Cozzi, Bernardo de la Maza, Álvaro Jofré, Harry Jurgensen, Patricia Labra, Hernán Larraín M., Cristián Monckeberg, Geoconda Navarrete, Manuel José Ossandón, Bárbara Rebolledo, Luciano Silva, Angélica Tepper, Paulina Veloso y Roberto Vega.
