Una exhaustiva revisión de la ejecución y conexión con los territorios de los Secretarios Regionales Ministeriales (Seremis) está realizando por estos días el Gobierno, con miras a evaluar posibles cambios de autoridades en ese nivel.
El análisis es el paso siguiente que está dando la administración del Presidente Gabriel Boric para mejorar la gestión, luego del último ajuste ministerial y de subsecretarios, en los cuales decidió otorgar mayor influencia al Socialismo Democrático.
Según comentaron a
Emol fuentes del oficialismo, esa tarea ha estado a cargo del jefe de gabinete de la ministra del Interior y ex convencional constituyente, Ricardo Montero (PS), en conjunto con el subsecretario de la cartera Manuel Monsalve.
La necesidad de chequear el trabajo de los seremis cobró relevancia en los últimos meses y semanas, dado que aún hay cargos vacantes en algunas zonas. De hecho, en su primer año de mandato, se ha registrado más de una treintena de renuncias.
Entre ellos, existen casos que levantaron polémica, como el de la seremi de Desarrollo Social de la RM, Patricia Hidalgo, quien acusó de irregularidades en su salida al titular de la cartera, Giorgio Jackson, o la del seremi de Minería de Valparaíso, Julio Zumaeta, entre otros.
En el total de los 287 cargos disponibles, existe una clara hegemonía del Frente Amplio (FA), que cuenta con 91 seremis a lo largo del país. Le sigue el Socialismo Democrático (SD) con 71 puestos y luego Chile Digno (PC, FRVS) con 41.
En definitiva,
Apruebo Dignidad tiene más cupos que las fuerzas de centroizquierda. A nivel de partidos, el que posee más representantes es Convergencia Social, con 36, seguido de cerca por RD con 33. El PC posee 32 y el PS, 29.
No obstante, más de 60 declaran ser independientes, aunque varios están asociados a algún partido en particular sin militar. El PPD cuenta con 23 seremías, seguido por Comunes, con 15. Luego está FRVS con 13, y el PR con 11.
Entre las fuerzas más pequeñas, el Partido Liberal tiene 8, Acción Humanista exhibe 7, lo mismo que UNIR, aunque varios de ellos migraron a CS. En ese contexto, estas últimas poseen la aspiración de sumar nuevos cargos para incidir más en el Gobierno.
Sin embargo, desde las colectividades advierten que, por ahora, desde Interior no les han comunicado la magnitud de las modificaciones ni tampoco solicitado propuestas de nombres para reemplazar a las autoridades que sean mal evaluadas.
Expectativas oficialistas
Según comentaron desde los partidos a este medio, los cambios de seremis se realizarán paulatinamente y no de una sola vez, como ocurrió con el último cambio de gabinete a nivel de ministros y subsecretarios ocurrido el 10 de marzo.
Asimismo, explican que, en esta oportunidad, la idea es sacar a un seremi que milita en una tienda y reemplazarlo por otro que pertenezca a una colectividad distinta. "Antes, el criterio era cambiar partido por partido", sostienen.
En esa línea, desde el Socialismo Democrático apuntan que existe un
"acuerdo tácito" entre sus colectividades para que, en caso de que se liberen cupos de seremis, puedan ingresar más representantes del Partido Liberal y el Radical.
Ambos partidos resultaron heridos tras el cambio de gabinete pasado, en el que los primeros sufrieron la baja del único ministro que tenían, el ex titular de OO.PP., Juan Carlos García. Los radicales, en tanto, no vieron aumentar su influencia en La Moneda.
Debido a ello, los liberales decidieron cambiar de presidente y generar un cambio de actitud respecto al Ejecutivo. En tanto, en el PR tomaron la determinación de tomar distancia del Gobierno hasta que no obtengan garantías de mayor incidencia.
En esa línea, los líderes de ambos partidos están expectantes ante la posibilidad de crecer en número de seremis, lo cual coinciden aplacaría de alguna forma el malestar que les dejó la decisión del Presidente de no darles más cupos ministeriales.
Al respecto, el timonel del PL,
Juan Carlos Urzúa, dijo que "como hemos manifestado, queremos participar y ser parte de la toma de decisiones del Gobierno. En ese sentido, tenemos las personas idóneas para participar en los distintos espacios".
"Por tanto, tenemos la expectativa de que se considere a los liberales en las seremías de todo el país, sobre todo en las regiones donde tenemos presencia. Queremos ser parte, porque el PL pone al Gobierno con un pie en el centro y eso es clave", agregó.
En tanto, su par del PR, Leonardo Cubillos, comentó que "hay un compromiso que se hizo como Socialismo Democrático el año pasado, de que en el caso nuestro, que tenemos 11 seremías, pudiésemos tener un poco más de representación".
La idea, apuntó es mejorar "los equilibrios políticos y para tener incidencia en los gabinetes regionales, porque hay regiones donde no tenemos Seremi (…) hicimos esa petición ante la ministra Tohá y el jefe de gabinete del Presidente el viernes".
Cubillos subrayó que "esas son solicitudes de incidencia para tener pertenencia y lo que hemos dicho es que ojalá se puedan concretar estas evaluaciones para incorporar al partido en esos territorios donde no tenemos nada.
Esperamos que se haga".
En la misma línea, el líder de Acción Humanista, Tomás Hirsch, explicó que "en nuestro caso, creemos que nuestros seremis han hecho un trabajo leal, comprometido y muy de acuerdo a las orientaciones de los ministerios".
"Por lo demás, tenemos un conjunto bastante pequeño de seremis, así es que en caso de que se produjeran cambios, esperamos poder aportar con nombres que el Gobierno conoce para asumir nuevas responsabilidades en distintas regiones del país", aseguró.
Finalmente, el presidente de RD, Juan Ignacio Latorre, sostuvo al respecto que “el proceso que ha habido es más bien una evaluación sectorial y luego hay una coordinación con Interior para efecto de tomar decisiones”.
"Ha habido cambios de seremías, pasa que no ha habido un solo momento para hacer un cambio global como el de ministros. Es más bien caso a caso por regiones y lo que se ha conversado en el comité político es que el Gobierno tenga buenos cuadros", dijo.
La idea, indicó Latorre, es que los nuevos seremis "representen bien al Gobierno, que no tengan agenda propia y responda al diseño del Ejecutivo. Más allá de los partidos y los equilibrios que pueda ser necesario realizar, es muy importante la gestión".