SYDNEY.- Un equipo de científicos de la Universidad Nacional de Australia descartó que el hombre de Flores, una isla en la zona este de Indonesia, característico por su baja estatura y peso, tenga un ancestro común con el hombre actual. Los "hobbits", como también se le denomina a esta especie, fueron descubiertos recién en 2003 y desde la fecha que se busca una relación con el Homo erectus.
Esta nueva investigación, liderada por Debbie Argue de la escuela de arqueología y antropología, demostró que no existe evidencia que relacione a estos seres de un metro de altura con el Homo erectus, un ser mucho más alto y con otras características, además de ser el único que habitó la zona en que fueron encontrados estos "hobbits".
El profesor Colin Groves, parte del equipo a cargo del estudio, comentó a The Guardian que la teoría de que el Homo floresiensis estuviese relacionado con el Homo erectus era "una buena hipótesis científica", sin embargo, añadió que "creemos que ahora ha sido completamente refutada".
El científico detalló que estos "hobbits" incluso fueron más primitivos y presentaban características más similares con el Homo habilis, una especie que habitó la Tierra entre 1,65 millones de años y 2,4 millones de años atrás, y que se trata de la representación más ancestral del gen humano.
Para lograr esta investigación, los expertos analizaron 133 muestras de cráneo, mandíbulas y dientes de diversas especies para la comparación de los restos fósiles.
Hasta ahora, se pensaba que este hombre de Flores podía ser producto de una malformación genética que afectó a algún ancestro de la especie humana como cretinismo, microcefalia o síndrome de Down.
No obstante, la nueva teoría de estos científicos, postula que los "hobbits" pudieron evolucionar de una rama del Homo habilis desde África que migró hacia las islas de Indonesia.
Por su parte, el profesor Mike Lee de la Universidad de Flinders y del Museo del Sur de Australia, aseguró que el "Homo floresiensis ocupó una posición muy primitiva en el árbol de la evolución humana" y aseguró que "podemos estar 99% seguros de que no está relacionado con el Homo erectus y casi 100% seguros de que no es una malformación del Homo sapiens".