NASA/JPL-Caltech/UCLA/MPS/DLR/IDA
WASHINGTON.- Una nueva misión fue dirigida a la sonda espacial de la NASA Dawn, que se encuentra orbitando el planeta enano Ceres desde junio de 2016. Hasta la fecha, la nave ha sido capaz de revelar nuevas características de la superficie, así como el hallazgo de componentes orgánicos.
Es por esto que la agencia espacial de Estados Unidos ha decidido que se acerque aún más al planeta, con la intención de analizar su superficie. En esta nueva misión, Dawn podrá llegar a una distancia de sólo 193 kilómetros, cuando hasta ahora sólo se había aproximado a un máximo de 386 kilómetros.
A esta distancia, la sonda será capaz de utilizar sus espectrómetros de rayos gamma y neutrones, para así estudiar la zona superior de las capas de Ceres y entender cuánto hielo se encuentra en ellas.
Ceres es un planeta enano que fue descubierto en 1801 y es el objeto más grande que se encuentra dentro del Cinturón de Asteroides que tiene el Sistema Solar entre Júpiter y Marte. Además, es el único cuerpo dentro de esta zona que se conoce tenga su propia gravedad.
Una de las dudas que se mantienen en torno a este planeta enano es el origen de los dos puntos brillantes que se velaron con las primeras imágenes enviadas por Dawn, algunos científicos creen que podría tratarse de criovolcanes, o volcanes de hielo, a pesar de que la NASA ha dicho que es un escenario poco probable.