SANTIAGO.- Son 150 años que avalan el trabajo de la prestigiosa revista científica Nature. Millones de estudios han sido publicados y comunicados a la sociedad. Magdalena Skipper, la primera mujer en convertirse en editora jefe de este medio, se presentó el recién pasado lunes en el Congreso Futuro, donde moderó el panel llamado: "El rompecabezas genética, desafíos las leyes de la naturaleza".
Skipper lideró la conversación entre Mayana Zatz, Moshe Szyf y Florencia Tevy, oportunidad en que e discutió sobre los avances y capacidades que tiene la genética en distintos aspectos, un tema que a la primera editora de la revista le apasiona.
Magdalena Skipper, quien es doctora en genética del Laboratorio de Biología Molecular en la Universidad de Cambridge, conversó con Emol sobre los próximos pasos de la genética y de una de las revistas científicas más prestigiosas, Nature.
"Preguntas de genética nos han preocupado por los últimos 150 años. El desafío reciente tiene que ver con los actuales eventos del año pasado, todos escuchamos que un investigador de origen chino creó dos gemelas modificadas genéticamente".
Sobre lo realizado por el chino He Jiankui, el científico que aseguró haber modificado genéticamente a dos bebés, Skipper comentó que "sucedió sin consentimiento ético. Este es un problema que nos preocupa, por cómo resolver esto, cuál es el próximo paso a futuro. Si es que en algún punto en el futuro terminas realizando este hecho de nuevo".
La profesional explicó que efectivamente "la comunidad científica ha estado considerando, hace un tiempo, terapia genética, en el contexto de hemofilia o ciertos tipos de enfermedades del ojo, donde puedes corregir un gen de manera local".
Sobre esto, la británica cuestionó el método de Jiankui, "lo que hizo fue modificar los embriones, entonces cada célula del cuerpo de estas bebés es modificado. Como si fuera poco, cuando estas niñas crezcan y tengan sus hijos, si es que tienen, esos hijos cargaran esas modificaciones. Es un cambio permanente del código genético, no solo en ellas, sino para las próximas generaciones".
El papel que juega Nature
La primera editora de la revista científica comentó cómo ellos abordan estos problemas éticos. "Nuestro rol es que sólo considerar investigaciones que son apropiadamente conducidas, que son realizadas legalmente, y que tienen todas las preocupaciones éticas".
Sobre esto, la profesional agregó que espera que exista un consenso en cuanto a lo que se debe o no se debe hacer. "Espero que toda la comunidad científica se reúna y provea líneas de guía, para sus miembros, de qué se debe realizar, cómo y cuándo. La analogía creo que es súper simple. Cuando cada uno de nosotros tienen un problema, es más simple resolverlo cuando lo discutes con alguien más y tienes sus consejos".
Magdalena Skipper considera que la revista, que este año cumple 150 desde su primera publicación, es un gran aporte a la comunidad científica, debido a que buscan acercar la ciencia a la ciudadanía.