Apoyar las rodillas en el suelo permite ganar fuerza de manera gradual.
El Mercurio
Las
flexiones de brazos, conocidas también como
push-ups o lagartijas, son un ejercicio esencial para
trabajar el pecho, los tríceps y el abdomen. Sin necesidad de equipamiento, este movimiento es
ideal para desarrollar fuerza, resistencia y tonificar el tren superior. Sin embargo, la cantidad adecuada de flexiones varía según el nivel físico y los objetivos personales de cada individuo.
Para quienes recién comienzan,
el enfoque debe ser progresivo, según expertos de Buff Academi App. Es recomendable realizar
entre 10 y 15 flexiones por serie, completando tres series entre tres y cuatro veces por semana. Para facilitar el inicio, una variante útil es
apoyar las rodillas en el suelo, lo que permite ganar fuerza de manera gradual y asegurar una buena ejecución.
A medida que se desarrolla la resistencia, se puede incrementar el número de repeticiones y series, llegando a
50 flexiones diarias, una cifra ideal para observar mejoras significativas en el desarrollo del pecho y los tríceps.
¿Cómo ajustar el número y cuánto se demoran los resultados?
Si el objetivo es mantenerse en forma y mejorar la resistencia, 30 a 40 flexiones diarias pueden ser suficientes. Para quienes buscan un desarrollo muscular más notable, aumentar el volumen y la intensidad, incorporando variantes como flexiones inclinadas, declinadas o con aplauso, ayudará a trabajar diferentes áreas del pecho y evitará que los músculos se adapten al ejercicio.
Se debe realizar las flexiones con
buena técnica para maximizar los beneficios y prevenir lesiones. Se debe mantener el
cuerpo alineado, los
abdominales contraídos y seguir un
ritmo constante, inhalando al bajar y exhalando al subir.
Con constancia,
los resultados pueden empezar a ser visibles en seis a ocho semanas. Durante este tiempo, se notará un
aumento en la fuerza del tren superior, mayor tono muscular en el pecho y los brazos, y una mejora en la postura y la estabilidad de todo el abdomen.
¿Quiénes deberían evitar las flexiones?
Aunque es un ejercicio accesible,
no es adecuado para todos.
Personas con lesiones en los hombros, muñecas o problemas lumbares deben consultar con un fisioterapeuta antes de incluirlo en su rutina. Si se experimenta dolor al hacer flexiones, es fundamental ajustar la técnica o probar variantes más suaves, como las inclinadas, para evitar lesiones y continuar fortaleciendo el cuerpo de manera segura.