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El desconocido origen venezolano de Jorge Valdivia

El volante chileno del Palmeiras nació en Maracaibo. Familiares cuentan detalles inéditos de su infancia, como su afición al béisbol: "Los Tigres de Aragua" era su equipo.

09 de Julio de 2008 | 11:35 | Leonardo Salazar Molina, El Mercurio Online
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Valdivia nació en Venezuela y llegó a los 3 años a Chile.

José Alvújar, El Mercurio

SANTIAGO.- Jorge Valdivia Toro nació en Maracaibo, Venezuela, el 19 de octubre de 1983. Destacado en la selección nacional de Chile, espera volver a vestir la "Roja" en el próximo amistoso ante Turquía.


Valdivia es chileno y sus padres también. Su hermano mayor Luis nació en Santiago, lo mismo que su hermanastro Hugo Bravo Toro (ex jugador de Palestino y Universidad de Chile), pero él, Jorge Valdivia, ahora figura del Palmeiras, vivió hasta los dos años en Venezuela.


La historia es simple. Luis Valdivia, el padre fanático de Colo Colo, trabajaba en las oficinas del Aeropuerto de Santiago para Lan Chile y le propusieron un traslado por "algunos años" a Maracaibo.


Allá en el caluroso Estado de Zulia, el futuro "Mago" nació y creció, jugando con una pelota de esponja y coqueteando con el béisbol.


"Jorge pasaba desnudo por el calor y jugaba con esa pelota que todavía debe tener guardada mi mamá. En ese tiempo el fútbol en Venezuela no era tan importante como el béisbol. Jorge y yo éramos hinchas de Los Tigres de Aragua", rememora su hermano Luis, "Quique" como le llaman en su hogar, un ex jugador de las cadetes de Palestino y siete años mayor que Jorge.


Uno de los mejores jugadores chilenos en el extranjero no alcanzó a ir al jardín en Maracaibo. Su vida era más bien apegada a sus padres y hermanos, con algún viaje por el país "caribeño", a las Islas Margaritas, por ejemplo.


La familia Valdivia no vivía en un barrio residencial, por lo que los juegos o las amistades con vecinos no fueron muchas. Cada verano viajaban a Chile y volvían al "calor" venezolano donde el béisbol era la sensación.


Hijo: el mejor equipo del mundo es Colo Colo


Aunque el fanatismo se volcaba a Los Tigres de Aragua, Jorge Valdivia de chico coqueteó con el fútbol. Su padre (al que ahora Jorge llama "pelao" o "socio") tenía banderines y fotos del equipo albo por todos lados y además jugaba en la "Selección chilena de Maracaibo", donde Jorge era una especie de mascota.


"Mi papá nos decía de siempre: el mejor equipo del mundo es Colo Colo", asegura Luis, ingeniero y hoy colega de su padre en la empresa OTIS.


La vuelta a Chile de la familia Valdivia fue a mediados de los 80 y la historia siguiente es conocida. Jorge comenzó a jugar en las cadetes de Colo Colo, debutó por la Universidad de Concepción en 2003 -donde estuvo a préstamo-, llegó a la selección, partió a España y Suiza y volvió a Colo Colo en 2005 donde se dio el destape definitivo.


En 2006 llegó al Palmeiras y ahora se espera que vuelva a la selección (su madre le dice hoy: "No insista tanto hijo, si lo van a llamar") y parta a Europa a brillar tal como en Brasil. Sería el cierre ideal de una historia que comenzó al ritmo del béisbol, del calor venezolano y de una pelota de esponja.

Cuando la familia Valdivia volvió a Chile en diciembre de 1985, la vida hogareña continuó, así como la relación de Jorge con el fútbol.

"Él siempre ha sido alegre, echaba la talla, cuando cocinaba me agarraba para bailar, desde chico", recuerda Elizabeth Toro, la madre de "Coke" como le decían cuando pequeño.

Una vez ingresado a las cadetes de Colo Colo, Jorge Valdivia debía responder en el colegio para poder seguir en el club y "por eso se sacaba buenas notas", dice su madre.

Los Valdivia seguían a Colo Colo y, por supuesto, a la selección. Jorge fue del brazo de su padre al Estadio Monumental en la campaña de la Copa Libertadores 91 y, cuando veían a la "Roja" camino a Francia 98, el adolescente Valdivia dio la sentencia: "Mamá, algún día yo estaré ahí".

Los concursos "si se la sabe cante" acompañaron la niñez del "Mago" junto a una campana que todavía está en la casa de la familia en La Florida.

En el barrio aún es conocida la fiesta navideña, cuando Luis, el padre, se disfraza de Viejo Pascuero y Jorge a bordo de una moto de agua lo pasea anunciando la llega de Noé.

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