''Si llega a suceder una tragedia, el Estado chileno deberá hacerse responsable'', afirmó la vocera.
El MercurioSANTIAGO.- Un ambiente de confusión se vivió los minutos posteriores a que la Corte Suprema comunicara el fallo que rebaja las penas contra los cuatro comuneros mapuches que llevan 80 días en huelga de hambre, en reclamo por un juicio justo, luego que el tribunal de Cañete los condenara por intentar matar a un fiscal y por el robo con intimidación a un agricultor.
Pese a que el máximo tribunal del país recalificó el delito de homicidio frustrado que pesaba en su contra, no modificó las penas por el atraco contra el empresario, lo que significa que de todas formas deberán cumplir una pena efectiva de cárcel por estos hechos.
La vocera de los comuneros mapuche, Natividad Llanquileo, se manifestó "muy decepcionada" de la justicia chilena y aseguró que los ex miembros de la CAM Héctor Llaitul, Ramón Llanquileo, José Huenuche y Jonathan Huillical continuarán con el ayuno en repudio a lo que calificaron como "un juicio injusto".
"No puede ser que se avalen los testigos sin rostro en estos procesos contra nuestros hermanos. Hablé con ellos y están tan molestos como nosotros y van a continuar la huelga de hambre. Algunos de ellos están realmente mal, pero si llega a suceder una tragedia, el Estado chileno deberá hacerse responsable de ello por mantener esta Ley Antiterrorista", dijo la portavoz.
Los abogados defensores de los comuneros señalaron, en tanto, que sólo queda recurrir a instancias internacionales como la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), donde los procesos son generalmente muy largos, por lo que temen que uno de los comuneros pueda morir antes de que esto se resuelva.
El ministro Jaime Rodríguez, quien participó en el fallo, hizo un llamado a los mapuches en ayuno a que depongan la huelga, recordando que fueron beneficiados con la rebaja de su sentencia, pero que deben someterse como cualquier otro chileno a la jurisdicción de los tribunales de justicia.
"Es respetable su situación (del ayuno), pero no la comparto en absoluto. No la comparto porque creo que ellos deben someterse a la jurisdicción de los tribunales de justicia que ellos aceptaron. En todos los juicios uno corre el riesgo de que no le guste lo resuelto, pero es un riesgo que todos los que entramos a los juicios en los tribunales debemos correr. Imagínese que cada uno obtuviera lo que quisiera, no podríamos tener tribunales", dijo.