MIGRACIONES EN AMÉRICA LATINA – ARGENTINA
Susana Trimarco es madre de Marita Verón, desparecida desde 2002. En su búsqueda llegó a infiltrarse en el mundo de la trata y desbarató varias bandas y liberó a 178 víctimas. Hoy, su lucha sigue a través de la Fundación María de los Angeles. “Noto que los casos de trata aumentan día a día. Así como la gente se va concientizando, dando la importancia a todo esto que nos sucede como ciudadanos, el gobierno también tiene que tener mucho más compromiso del que tiene ahora. El que más ayuda es el gobierno nacional”, dijo.
En el mismo sentido se pronunció Eugenio Ambrosi, representante Regional de la OIM para los Países del Cono Sur de América latina: “Hay un elemento de optimismo. A nivel global hay una serie de organizaciones internacionales y de varios gobiernos para luchar contra la trata mucho más fuerte, y en la Argentina lo más importante es la creación del programa, un paso muy importante”.
Uno de los elementos por el que todas las organizaciones abogan es una legislación que castigue este delito. En la Argentina hay un proyecto de ley, que cuenta con media sanción del Senado, que tipifica como delito federal a la trata de personas con penas que van desde los tres a los 15 años de prisión. El proyecto debe ser debatido ahora en la Cámara de Diputados. Con esta herramienta legal el delito se amplía a cualquier tipo de actividad relacionado con la trata y no sólo la prostitución, como el trabajo forzado, las situaciones de esclavitud y hasta la extracción de órganos.
La iniciativa castiga la recepción y el albergue de personas para cualquier tipo de explotación. Y se tomará como agravante, con una pena de cuatro a diez años, si el autor fuera familiar, encargado, ministro de algún culto o funcionario público. Si la víctima es menor de 13 años, la escala penal será de 10 a 15 años. Además, declara inimputables a las víctimas, a las que se le reconocen derechos como recibir atención psicológica, protección de identidad y no ser alojados en establecimientos penitenciarios.