79 años cumple la estatuilla hollywoodense que carga una espada entre sus brazos cruzados. El solicitado galardón que premia el mérito y el glamour de los profesionales del mundo cinematográfico, tiene una larga trayectoria a lo largo de la historia.
El Oscar que cada año anhelan directores, actores y actrices, nació bajo el alero de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos con motivo de promover la industria cinematográfica y dignificar a quienes trabajaban en ella.
La historia del trofeo de oro comenzó en 1927 cuando Louis B. Meyer, fundador de Metro Goldwyn Meyer, creó la Academia. El actor Douglas Fairbanks y primer presidente de la institución, fue precisamente el de la idea de instaurar la tradición con que hasta hoy cuenta el séptimo arte.
La primera entrega se celebró el 16 de mayo de 1929 en el hotel Hollywood Roosevelt y tuvo como gran triunfador a Charles Chaplin quien fue distinguido con un premio honorífico como mejor actor, director y guionista por su película “El Circo”.
En la década de los 40, el ganador de la estatuilla indiscutido fue Walt Disney, quien pasó a la historia como la estrella más premiada. El creador de Mickey Mouse obtubo más de 60 nominaciones y 26 Oscars, principalmente por sus cortos de animación.
En los cincuenta, los premios se caracterizaron por distinguir grandes espectáculos visuales. El cine de moda estaba lleno de películas donde el color, el vestuario y el glamour eran los protagonistas. Esta década fue la que galardonó a “Ben Hur”, que junto con “Titanic” y “El señor de los amillos”, es la película con más estatuillas de la historia, acumulando once Oscars en 1959.
Ya en los sesenta, las bandas sonoras y los grandes musicales -como "West Side Story", de Robert Wise, que obtuvo diez estatuillas en 1961- fueron lo más llamativo de la época.
En los años setenta y ochenta, la mirada nuevamente se volcó en el trabajo de los directores. En este tiempo destacaron nombres como Francis Coppola con “El padrino” y “Apocalypse Now”, Steven Spielberg con “En busca del arca perdida” y “E.T. El extraterrestre” o George Lucas con “La guerra de las galaxias”.
Las películas de la década siguiente, fueron premiadas, en general, por las nuevas tecnologías. Los efectos especiales que se veían en la pantalla grande e impresionaban a los espectadores, se apoderaron de las candidaturas. Es el claro ejemplo de “Titanic”, con 11 estatuillas.