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  Laura Vicuña Pino

Nació en Chile el 5 de abril de 1891. Poco después del nacimiento de su hermana, en 1895, muere José Domingo, el padre de las niñas y la familia queda en la indigencia.

Buscando el bienestar de la familia, Mercedes su madre, se traslada a Neuquén en 1899 y luego a la estancia Quilquihué a 20 kilómetros de Junín de los Andes. Allí comienza a convivir con Manuel Mora, poderoso y rico dueño de la hacienda.

Laura y su hermana Amanda ingresan al internado del colegio María Auxiliadora, donde es muy sensible a la fe cristiana. A los 10 años recibe la Primera Comunión.


Camino a los altares


4 de Junio de 1986: el Papa Juan Pablo II la declara Venerable.

3 de septiembre de 1988: beatificación.

Milagro para la beatificación: curó a Sor Ofelia Lobos Arellano de una enfermedad pulmonar que padeció durante diez años y por la cual tenía pronóstico de muerte. Estaba rezando a Laura Vicuña y tratando de descubrir la voluntad de Dios. "De pronto se hizo una luz muy grande y comprendí que por intercesión de ella, Dios haría lo que yo eligiera". La religiosa pidió salud para continuar con el trabajo."En ese mismo momento sentí que mis pulmones se dilataban rápidamente, desapareciendo la fiebre y todo otro malestar"

Actualmente es: beata
En Internet: www.lauravicuna.cl

Durante una clase de catecismo se da cuenta que su madre, al estar conviviendo con Mora, está alejada del Señor y reza para que se vaya de Quilquihué y se reencuentre con Dios.

Ya adolescente regresa a la hacienda durante sus segundas vacaciones. Manuel Mora, impresionado por su belleza trata de abordarla y es rechazado. Durante una fiesta la invita a bailar y al ser nuevamente rechazado la arrastra fuera de la casa y debe dormir a la intemperie. Luego golpea a Mercedes.

Mora la chantajea y decide no pagar más la cuota de la escuela, pero las hermanas la becan para que continúe educándose.

Laura decide ofrecer su vida por la conversión de su madre.

Guiada por el ejemplo de su profesora, la religiosa colombiana Ana María Rodríguez , crece su deseo de consagrarse al Señor. Sin embargo, debido a la vida que lleva su madre, su postulación es rechazada por la superiora.

Durante su último año de educación primaria, una inundación afecta al colegio. Los trabajos y el crudo invierno debilitan más la salud de Laura y cae enferma.

Su madre se la lleva a la hacienda, pero su situación empeora. Entonces decide regresar a Junín y cuidarla en una casa arrendada. Mora llega gritando que pasará la noche allí y que deben volver a la hacienda al día siguiente. Pero Laura dice que debe irse, incluso que volverá al colegio si él se queda. Furioso, el hacendado le da una feroz paliza a la joven.

Durante los días siguientes Laura es visitada por el obispo Don Crestanello y las hermanas, pero ellos deben viajar a Chile y es el sacerdote Genghini quien le administra la comunión y, al agravarse, la extremaunción.

Viendo próxima su muerte Laura le dice a su madre: "Mamá, la muerte está cerca, yo misma se la he pedido a Jesús. Hace dos años le he ofrecido mi vida por ti, para que regreses a Él". Y le pide que abandone a Mora y se convierta.

Mercedes le promete cumplir su deseo. Para ello debió huir de noche y disfrazada y encomendar a Amanda a las hermanas de María Auxiliadora. Cruza sola la cordillera de regreso a Chile.

Laura murió un 22 de enero de 1904, a los 12 años. Sus restos fueron sepultados al pie del Cerro de la Cruz, primer cementerio de Junín de Los Andes. Desde 1937 hasta 1958, descansaron en el cementerio ubicado sobre Avenida Necochea. Luego fueron trasladados a Bahía Blanca, Argentina, donde se encuentran actualmente.