Ver más fotos |
Tras perder su trabajo en Talcahuano por los efectos del terremoto del 27-F, Bustos optó por viajar al norte y probar suerte en el sector minero.
En el momento del derrumbe se encontraba en el interior de la mina debido a que un camión se encontraba en panne y debía repararlo.
Tras el rescate volvió a Talcahuano, donde ocupa su tiempo dictando charlas motivacionales.
Fue uno de los 33 que no se sumó a la demanda contra el Estado en la que solicitan una indemnización por la poca fiscalización que tenía en yacimiento San José.