Alyn y Nill, además, grabaron una escena como los padres de Lois Lane para la primera película del personaje que protagonizó Cristopher Reeves, pero su participación fue sacada de la edición final que llegó a los cines.
En ese primer registro, el villano de turno no fue Lex Luthor. La misión de acabar con el hijo de Jonathan y Martha Kent estuvo a cargo de una villana, “La mujer araña”. La dirección estuvo a cargo de Spencer Gordon y Thomas Carr.
Una de las cosas que distinguió a estas producciones fue que los capítulos estaban editados con finales inconclusos, que sólo se resolvían si uno veía el siguiente episodio de la saga.
La táctica dio resultados porque la serie logró un gran éxito, que le permitió tener una segunda temporada en 1950, que se llamó “Atom man vs. Superman”.
“La mujer araña” pasó a retiro para permitir el debut de Lex Luthor en la pantalla grande, interpretado por Lyle Talbot.
En 1951, la popularidad de la serie bajó y le dejó el camino libre a un nuevo proyecto: “Superman and the Mole-Men”, un largometraje de 59 minutos que fue usado finalmente como el piloto de la primera entrega de TV.
Este proyecto renovó al elenco de actores, Clark Kent fue interpretado por George Reeves y a la reportera del diario “El Planeta” la interpretó Phyllis Coates.
La era de Reeve
Brandon Routh tendrá una dura tarea interpretando al nuevo Superman, porque no sólo deberá enfrentarse con Lex Luthor y sus locos planes para matarlo. Además, deberá esforzarse por dejar en el pasado la imagen de Cristopher Reeve, quien con sus cuatro películas es el referente histórico del personaje.
A la sombra de un mito
En 1978, Warner Bros. comenzó a producir la saga de películas más popular de la creación de Joe Shuster y Jerry Siegel.
La dirección de “Superman, la película” quedó a cargo de Richard Donner (responsable de las cuatro partes de “Arma mortal”), quien optó por un actor desconocido hasta ese momento para que vistiera la capa: Christopher Reeve.
