Vicentico

Para más de alguno la voz de Vicentico no dejará de ser la de Los Fabulosos Cadillacs. Sin embargo, desde que el intérprete comenzara una carrera como solista en 2002, ha logrado instalar pequeños éxitos que bien han consolado a los viudos del combo ska.

“Se despierta la ciudad”, o sus versiones para “Los caminos de la vida” o “Algo contigo”, han reubicado al cantante argentino en el mapa de la música popular latinoamericana, con una popularidad de la que Chile no ha escapado.

Así lo demostró con presentaciones a tablero vuelto en el Teatro Caupolicán y en el Festival Vive Latino, entre otras, en las que el público coreó y bailó con la misma energía tanto “Mal bicho” como “Tiburón”.

Vicentico (2002), Los rayos (2004) y Los pájaros (2006) ya son un material habitual en las estanterías de los viudos de los Cadillacs, pese a un tono más cercano al romanticismo de cantina que a la juerga de su antigua banda. Un factor que, de todos modos, podría resultar útil a la hora de compartir público con un portento de la balada como Marco Antonio Solís. Y si a ello agrega algo de fiesta, tan buscada en cada cierre de jornada festivalera, mejor todavía.

Disco sugerido: Vicentico (2002), el eslabón que mezcla lo que quedó de Los Fabulosos Cadillacs con su perfil solista.

Por qué verlo en Viña: Para comprobar que hay vida después del triunfo en el rock pachanguero.