La historia del cine de ciencia ficción sufrió un abrupto remezón en 1977, cuando George Lucas estrenó la primera parte de “La Guerra de las Galaxias”, una película que significó un gran adelanto para la época en el campo de los efectos especiales.



Hoy en día lo que hizo Lucas en esa época puede parecer obsoleto y a muchos les costará entender cómo esas películas pudieron tener tanto éxito, pero a fines de la década de los ‘70 los viajes a través del hiper espacio del “Halcón Millenium” (la nave de Han Solo) o el vuelo de las grandes destructores estelares del Imperio, fueron una real innovación.

La obsesión de Lucas por darle realismo a su guión lo llevó a crear Industrial Light & Magic, una empresa que nació para dedicarse en exclusiva a la creación de los efectos especiales de la saga y se ha convertido, con los años, en una de las mas prestigiosas en su rubro, colaborando en producciones como “Jurassic Park”.

El casting fue minucioso y varias estrellas intentaron quedarse con algún papel, como John Travolta, Burt Reynolds, Kurt Russel y Jodie Foster, incluso el papel de Obi-Wan estuvo a punto de llegar a las manos del japonés Toshiro Mifune, famoso por sus trabajos con Akira Kurosawa.

El guión fue otro dolor de cabeza para el realizador, que trabajó varios borradores antes de decidirse a filmarlo, gracias al apoyo que obtuvo de Fox.