Este año se decía adiós a la tradicional Concha Acústica, para dar paso a un escenario más moderno de estilo anfiteatro. Sin embargo, no todo era felicidad por este hecho y pese a que cantantes como Cristian Castro decían que esto era un lujo y que debíamos cuidarlo, algunos técnicos del Canal 13, partiendo por el propio director de televisión, Felipe Pávez, reclamaban por la mala acústica y, sobre todo, porque el nuevo recinto no estaba acomodado para efectos televisivos; sin embargo, todo es cuestión de costumbre y el consenso general es que esta nueva infraestructura era un salto que se debía dar en pos de la modernidad.
Esta edición sufrió la caída de unas de sus principales figuras: el cantante Rod Stewart, quien al cancelar su actuación en Lima hacía imposible poder costear una sola visita a Sudamérica. Se buscó un reemplazante de última hora sin éxito, pues finalmente Chayanne se repitió el plato la última jornada. Fue el primer gran bochorno que debió enfrentar el Canal 13 desde que asumió la organización del evento.
En cuanto a la animación se volvía a la modalidad antigua de ir rotando las coanimadoras de Antonio Vodanovic. Así, se pasearon por el escenario: Myriam Hernández, Andrea Tessa, Natalia Oreiro, Patricia Manterola, Angélica Castro y para la noche final Cecilia Bolocco, quien hace poco se había casado con el ex presidente argentino, Carlos Menen. Existían nervios en la organización, pues las noches previas cuando la ex Miss Universo era presentada recibía las pifias de la gente, pero ello no influyó para que sorteara con éxito este nuevo desafío en Viña.
En cuanto al show internacional el encargado de abrir fue Cristian Castro quien hace años no se subía a la Quinta y traía como carta su éxito “Azul”. La jornada inaugural también vio las actuaciones del argentino Sergio Dalma, el grupo de adolescentes As Meninas con sus éxitos “Taphiña” y “Xi bom bom”, y para cerrar se juntaron los grupos argentinos Nietos del Futuro y Chocolate, estos últimos creadores del hit del verano “La Mayonesa”.
Sin duda que este fue el año del “Axé”, ritmo brasileño que sonaba en cuanta fiesta o discoteque del país. Sus máximos representantes, Axe Bahía, marcaron un rating histórico de 66 puntos como peak y en la quinta se vivió una verdadera fiesta con su participación en una de las noches más complejas que haya vivido el festival en años, por lo largo de los shows. Así, Ricardo Montaner tuvo una extensa actuación, no solo cantando, sino que contando historias lo que fue duramente criticado por los artistas chilenos, pues ello significó que tanto el humorista “Arturito” como DJ Méndez subieran a altas horas de la madrugada. La Ley, conjunto que actuaba otra de las noches, sacó la voz diciendo que era una falta de respeto lo que había hecho el venezolano.
En la noche chilena, que ya se consolidaba dentro de las seis jornadas, tuvo a La Ley como máxima figura quienes mostraron un espectáculo sólido como una banda plenamente consolidada y de gran éxito internacional. Esa noche se hizo un deslucido homenaje, por años postergado, al cantante chileno Lucho Gatica. Problemas de sonido y en sí el acto mismo algo improvisado, hicieron que este momento no tuviera el glamour que se merecía este histórico de la música chilena. También, actuaron Javiera Parra y los Imposibles, El Temucano y para cerrar un renovado grupo Illapu.
Por primera vez actuaba en Viña del Mar el cantante argentino Fito Paez quien con sus éxitos como “A rodar mi vida” y “11 y 6”, hizo que la quinta viviera uno de los momentos más álgidos de las seis jornadas. Otros artistas que se presentaron fueron Germán Casas que tuvo un inesperado éxito llevándose la primera Gaviota de Plata a pedido del público que ovacionó su presentación; la cantante argentina Soledad volvía ya más madura a deleitarnos con su estupenda voz; Los Jaivas cerraron una de las jornadas en su última actuación en Viña antes de la trágica muerte de su vocalista “El gato Alquinta”; además, actuaron Cecilia Echenique, Víctor Heredia, Myriam Hernández, Patricia Manterola, Juan Gabriel, Piero y la despedida triunfal de los escenarios de la Cuatro Dientes, quien hizo reír y llorar a la Quinta Vergara.
El tema "Juramento", compuesto por Carlos Rincón y defendido por Eduardo del Perú, barrió en la final del género folclórico al adjudicarse los premios al Mejor Intérprete y Mejor Canción, que le significaron a la delegación andina cuarenta mil dólares en total. En tanto, el tema ganador en el género internacional fue “Soy tu ángel” interpretada por la argentina Valeria Lynch. El premio al mejor intérprete se lo quedó Duvalier Quiros, representante de Costa Rica.
Este año será recordado como uno de los más criticados tanto por la prensa especializada como por la gente, pues se reclamaba la baja calidad de los artistas. Viña ya no era- como dijo en una entrevista a “La Tercera” el productor Camilo Fernández- un semillero, y solo se traían artistas de moda que se repetían año tras año.
Textos y recopilación
Víctor Hugo Moreno y Rodrigo Palma